¿Las bolas de GEL para plantas pueden ser tóxicas o peligrosas para la salud?

Está semana nos estrenamos con una consulta recibida por email por parte de una madre preocupada por las Bolas de GEL que se venden mucho últimamente en las tiendas de importanción y que están utilizando los niños para jugar y llevar al colegio.

Estas bolitas normalmente se rellenan de agua y contienen un colorante en polvo sin ninguna función mas que resulten bonita y atractivas.  Su fabricación y venta está destinada al uso decorativo o como hidratante para plantas ya que tiene la capacidad de absorber líquidos y soltarlos poco a poco.

El problema está cuando se usa para algo distinto para lo que fue diseñado, y mas aún cuando su uso es entre niños y como juguete.  Hay que tener en cuenta que al no ser un juguete ni un alimento es un producto que no pasa ninguna inspección de sanidad ni de seguridad, por tanto su contenido, forma, etiquetado y seguridad dependerá totalmente del fabricante y vendedor del producto.

Muchas veces al ser vendido en tiendas de importación se sitúan al lado de juguetes, con un etiquetado incorrecto o en otro idioma ininteligible para la mayoría de nosotros, por lo que no sabemos que estamos comprando.   

¿Cuales son los riesgos que suponen para los niños estos productos?

- Riesgo de intoxicación: Al ser coloridas y blandas, un niño las puede confundir fácilmente con una chuchería.  Su ingesta puede ser inocua o puede tener graves consecuencias para el niño, al no tener regulación en este aspecto dependerá mucho de los materiales utilizados por el fabricante, pero entre otros componentes estas bolas pueden contener:

1. Nutrientes para plantas (o abono o fertilizantes) con un nivel de toxicidad alto en caso de ingestión. No suele ser un componte que incluyan las tiendas de importación, si las dedicadas a la jardinería.
2. Poliacrilamida: Es un compuesto orgánico muy utilizado en cosméticos, textil o en la industria química. También está presente en el humo del tabaco y se forma al freir algunos alimentos, se asocia con casos de Cancer (está catalogado como 2A en el nivel de riesgo cancerígeno) y asociado a daños en el sistema nervioso.  Los efectos tóxicos se dan por encima de 100 mg/kg, un niño de 10 kilos de peso debería ingerir 62 gramos de este producto para que resultase tóxico en una sola ingestión (algo poco probable).  Pero no sabemos la cantidad de este producto que puede estar presente en cada bola.

- Riesgo de ahogamiento o asfixia: Este tipo de bolas de GEL están realizadas con un material que absorbe el agua y pueden aumentar su tamaño en el 900%. En la mayoría de las bolsas se indica que no se utilicen por menores de 6 años por riesgo de ahogamiento, pero el ahogamiento no es el único problema, la ingestión de varias de estas bolas podría producir problemas en el estomago o intestino por su capacidad de absorber los líquidos y provocar una obtrucción intestinal.

- Riesgo de introducción en nariz y oído: Aunque es poco probable, si una de esas bolitas llega a los pulmones puede provocar asfixia o paro respiratorio debido al volumen que pueden alcanzar dentro.  En un oído pueden provocar daños permanentes y son además difíciles de extraer.

Este producto no es nuevo en absoluto, y ya desde el 2009 hay avisos de distintas asociaciones y organismos para que se utilice correctamente y no como juguete.  En Chile, Murcia y Madrid se detectaros casos de gastroenteritis, dolor abdominal, obstrucción del oído e incluso una hospitalización por asfixia por culpa de estas Bolas de Gel o Hidrogel.

Conclusión: ¿Son realmente peligrosas estas Bolas de Gel?  No. Por si solas no lo son, pero no son un juguete para llevar al colegio dado su riesgo en caso de ingestión y se debe limitar su uso a la función para la que fueron fabricadas.